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Tuesday, November 01, 2005

TE DEJO MI CHILE ATRÁS...

...A la mañana siguiente salimos a desayunar Dominik y yo; de ahí me iré a despedirlo y regresaré al hotle. Le deseo lo mejor ya que ahora le toca manejar solano unas cuantas horas hacia el 'desierto florido' en el corazón de Atacama y luego todo el regreso (aproximadamente 3 ó 4 días si se viene tranquileando). Yo tomó el autobús por eso de las 11 de la mañana (conseguí un boleto muy barato la noche anterior). Una leve espera y emprendo un viaje de aproximadamente 18 ó 19 horas... a pesar de todo el viaje me lo paso bien, como curiosidad hay servicios tipo avión: un almuerzo (o comida), merienda, cena y en la madrugada a unas horas de llegar a Santiago, un desayuno... El autobús se para en varios poblados por el camino. Pasan algunas películas dobladas al español (que mierda). Un punto entre el subdesarrollo y la mejor atención posible es lo que se vive en un viaje de autobús de estas características... Llego demasiado temprano a Santiago, por ahí de las 6-7 de la mañana, en el hostal no están las hermosas chicas que atienden, pues su llegada es hasta las 9, pero la señora del aseo me deja pasar a dejar mi mochila en un cuarto o estancia. Aprovecho poco después para ir al mercado a comprar unas botas, discos y películas... también algo de ropa. Comienzo a buscar un poco más por el centro y desde ese domingo hasta el martes conozco un poco más la zona... también me doy cuenta de mis errores al haber comprado cosas en los días anteriores, las cuales pude haber conseguido más baratas en otros sitios. En fin, termino las entrevistas restantes, convivo y conozco a Rodrigo Santis del grupo Congelador, logro ver el último día a Piero Medone, ex-músico que conocía por internet solamente y trato de gastarme lo poco que me queda en algunos últimos discos (algo caros debo confesar). Ya para volver he comprado un par de vinos (uno de ellos en el aeropuerto), Ricardo, un amigo que me apoyó harto allá, me acompaña al autobús que me llevará al Aeropuerto... veo por última ocasión a las diversas bellezas que puluan y me meten ideas tan peligrosas como tomar una de ellas y sentar cabeza a su lado, así que mejor regresó a México ya! Las azafatas de Aeroméxico son menos jóvenes que las chilenas en mi vuelo de ida, supongo que aquí hay más pugnas por parte de los sindicatos, jaja, pero claro, eso evita las posturas sumamente sexistas y habrá quienes trabajen en eso durante una vida... a mi lado viene una cubana de atrayentes pectorales y agradable escote. Quisiera que algo pasara como en las películas eróticas y vivir alguna fantasía con la morenaza en cuestión, pero la realidad es que ella tiene su trasborde hacia Cuba y yo solo cuento con 40 minutos para subirme al avión del DF a Vicky ranch... me acelero porque veo una enorme cola de recepción de vuelos internacionales... de hecho a punto estuve de perder el vuelo si no fuera porque luego de 2 vueltas y preguntas a gente aduanera de pocas pulgas ví que la fila más larga era para extranjeros. Mi mochila será trasbordada por la misma agencia de viajes pero pasa algo que temí: se pierde la mochila... más bien se queda en el DF cuando yo llego como stripper a mi cudad a las 8 de la mañana: vine con camiseta de manga larga encima de una playera y una chamarra de cuero comprada en Chile encima... las prendas comienzan a ser retiradas de mi cuerpo así que llego con las manos cargadas y una bolsa con vino y chocolates... el calor es contrastante con el clima húmedo que me despidió en el sur de América. Mi mochila llega a las 4 de la tarde... las bolsas de los lados están abiertas así que algunas cosas se han tirado (señores aduanales: chinguen a su madre). Por fortuna la mayoría de las cosas son encontradas en el Aeropuerto local y al día siguiente paso a recogerlas... solo extraño mi peine (el único que entraba bien en mi maraña de cabellos). Bene, así estuvo ese rol...

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